Los taxistas proponen en las paradas puntos de carga para coches eléctricos

La Cooperativa presenta el primer vehículo que prestará servicio en Valencia con un motor de baterías

Francisco Javier Pérez es el nombre del primer taxista de Valencia y su área metropolitana que se ha lanzado a la aventura de comprarse un taxi eléctrico, con el propósito de reducir gastos y apostar por un transporte público basado en la falta de polución.

Tiene una autonomía de 150 kilómetros, por lo que debe recargarlo en casa por la noche (cuatro horas) y después acudir a un punto de carga rápido. La Cooperativa de Taxis presentó ayer la iniciativa pionera, a escasa distancia de donde está uno de los puntos.

José Pedro Pérez, el presidente de la cooperativa, indicó que uno de los elementos más interesantes del proyecto es el ahorro en el mantenimiento del vehículo. En Valencia, de la flota de 2.850 taxis que hay en la actualidad, una tercera parte son híbridos, mientras que el resto se reparte entre gasóleo y motor movido a gas.

Pérez pidió al concejal de Movilidad, Giuseppe Grezzi, que apueste por la colocación de más puntos de carga, al indicar que el desarrollo de los taxis eléctricos se basa sobre todo en que haya este tipo de infraestructura en la ciudad.

El anterior gobierno municipal colocó uno en la plaza del Ayuntamiento, junto a Correos como recordó Grezzi, aunque después no hubo nada más. «Dijeron que iban a poner un centenar de puntos de carga, pero no sabemos nada», dijo.

De momento habrá puntos de carga en uno de los concesionarios de la marca del taxi eléctrico, además de alguno más en aparcamientos públicos. «Hoy por hoy, es una gesta heroica que un compañero esté dispuesto a trabajar en un coche eléctrico», dijo Pérez por la falta de carencias de puntos de carga.

«Solos no podemos, necesitamos la ayuda de instituciones para fomentar este transporte, darle impulso». En su opinión Valencia es una ciudad «idónea porque es muy llana, aunque hacen falta puntos estratégicos para no interrumpir el servicio». Apuntó a que las tomas eléctricas deberían estar en todas las paradas de la ciudad, para que sirvan además como lugares de descanso para los conductores.

«Por parte del sector hay inquietud, sabemos que el ahorro es considerable en el mantenimiento del vehículo, aunque tenemos que ver la respuesta de la Administración», a lo que Grezzi se comprometió a contar con los taxistas en el desarrollo del Plan de Movilidad a lo largo de este mandato.